
SanCor, una de las cooperativas lácteas más emblemáticas del país, atraviesa una situación crítica. A la caída de su producción y la pérdida de proveedores, ahora se suma el remate público de 43.750 kilos de queso pasta dura, convocado por la empresa Hypred Argentina S.A. para el próximo 23 de abril.
El lote se encuentra almacenado en la planta de La Carlota, en Córdoba, y el valor base fue fijado en u$s371.875, según se detalló en un edicto oficial. La mercadería está respaldada por un warrant que originalmente pertenecía a SanCor y fue cedido a la firma acreedora.
SanCor: antecedentes de la crisis
Fundada en 1938 en Sunchales, Santa Fe, SanCor llegó a ser la mayor láctea del país. Pero desde 2016, comenzó un proceso de achique para hacer frente a una crisis financiera que no ha dado tregua. En ese período, se redujo de 5.100 a 1.350 empleados, sin contar los 300 telegramas enviados recientemente.
Además, la cooperativa vendió o transfirió varias plantas e instalaciones clave: las de Coronel Moldes, Centeno, General Charlone, Morteros, Chivilcoy y Porteña. También se desprendió de su línea de productos frescos como yogures y postres.
Actualmente, la deuda supera los 400 millones de dólares, y SanCor no consigue un socio que aporte capital para reactivar la producción y recuperar tambos. Su actividad se limita a pocas plantas operativas y una producción muy por debajo de los niveles históricos.
Producción mínima y sin proveedores estables
En su mejor momento, SanCor procesaba más de 4 millones de litros de leche por día. Hoy apenas alcanza los 70.000 litros diarios. La falta de fondos y los esquemas de pago complicados hicieron que la mayoría de los tambos buscaran otros compradores, dejando a la cooperativa con una red de proveedores casi inexistente.
A días del remate anunciado, la situación de SanCor es cada vez más incierta. El resultado de la subasta y el avance del concurso preventivo podrían definir parte del futuro inmediato de una marca que fue sinónimo de lácteos en la Argentina.