La marca de chocolates Toblerone cambió su tradicional forma en el Reino Unido, separarando los triángulos de su famoso chocolate por una cuestión de costos (mantener el mismo precio a cambio de menos chocolate) y desató la furia de los consumidores.
Toblerone alteró así algo que la distinguió por más de un siglo, y que se jactaba de que era uno de los secretos de su éxito: la forma de sus característicos triángulos, y que ademas que conformaban uno de los rasgos más consolidados y reconocibles del mundo en materia de chocolatinas.
Según explicaron medios británicos, al separar los triangulitos se logró un 10% menos de peso. El cambio afecta a las barras de 170 gramos y de 400 gramos, que ahora pesarán 150 y 360 gramos respectivamente, y se seguirán vendiendo al mismo precio.
Tiempo atrás, la empresa había explicado los motivos de tal cambio de paradigma en un comunicado dirigido a los «fanáticos» de la marca. Y, al parecer, todo se trata –como de costumbre– de dinero.