Ayudín y FUNCEI ofrecen claves para prevenir la infección por Rotavirus

El Rotavirus es la principal causa de diarrea en el mundo. Este agente produce 111 millones de casos, 25 millones de consultas médicas, 2 millones de hospitalizaciones y aproximadamente 611.000 muertes anuales, principalmente en lactantes y niños pequeños.

Este virus es una causa muy frecuente de gastroenteritis en invierno y primavera. En dichos meses, el 70-80% de las diarreas son producidas por este agente infeccioso. La enfermedad está caracterizada por vómitos y diarrea líquida de 3 a 8 días de duración, que pueden presentarse acompañados de fiebre, dolor abdominal y deshidratación. La infección también puede estar acompañada por síntomas respiratorios, como tos y resfrío.

El Rotavirus es un agente muy contagioso y las personas que contraen la infección propagan grandes cantidades del virus a través de la materia fecal. La transmisión se produce cuando el virus llega a la boca del huésped a través de manos u objetos contaminados con heces de una persona infectada. La diseminación intrafamiliar y en hospitales, guarderías y otras instituciones es muy habitual. El lavado frecuente de manos y la desinfección de las superficies deben ser conductas adoptadas rutinariamente para prevenir este tipo de enfermedades.

Consejo preventivo:   La vacunación es el método más efectivo para prevenir las formas graves de esta infección. La desinfección del medio ambiente es de suma importancia para minimizar los riesgos de transmisión, dado que el Rotavirus es un agente muy estable y puede persistir infectante por varias horas en las manos y hasta días en otras superficies. Se recomienda lavarse frecuentemente las manos con agua y jabón, y utilizar una solución compuesta por una cucharada de lavandina (12ml) por litro de agua corriente para desinfectar todo tipo de superficies. Para la desinfección de objetos de uso corriente -como mesas, teléfonos, teclados y juguetes- también pueden utilizarse toallitas desinfectantes descartables listas para usar.

 

Fuentes de Información:

Sociedad Argentina de Pediatría

Organización Mundial de la Salud

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