Lo que comenzó en 2017 como una iniciativa en Facebook de un grupo de kiosqueros, hoy se convirtió en una movida nacional que propone extender la Semana del Alfajor a todo mayo. ¿El motivo? Siete días no alcanzan para celebrar uno de los productos más queridos por los argentinos, un ícono y emblema nacional.
De los kioscos al país entero
Desde su origen, la iniciativa fue creciendo año tras año y hoy cuenta con el apoyo de miles de kioscos, marcas alfajoreras, medios y, sobre todo, de los consumidores. La propuesta no solo busca homenajear al alfajor, sino también revalorizar al kiosco como canal de venta clave, aprovechar mayo para lanzamientos especiales y reforzar el lugar que ocupa este ícono nacional. En Argentina, el alfajor no es solo una golosina: es parte de nuestra identidad cultural. Y si hay un lugar donde se compra, se elige y se disfruta, ese lugar es el kiosco.
Una historia con más de 135 años
El alfajor tiene raíces árabes y españolas, pero fue en Argentina donde encontró su identidad definitiva: relleno con dulce de leche, bañado en chocolate y vendido en millones de kioscos desde hace más de un siglo con un fuerte auge desde 1950. Su presencia es tan fuerte que incluso forma parte de nuestra historia: parte de la Constitución Nacional de 1853 fue redactada en Merengo, la alfajorería más antigua del país, ubicada en Santa Fe.
MES DEL ALFAJOR: Un mercado en crecimiento constante
Según datos de la Asociación de Distribuidores de Golosinas y Afines (ADGyA), en 2023 se comercializaron 10 millones de alfajores por día, lo que equivale a 115 alfajores por segundo. Es la golosina más vendida del país y un producto que sigue generando pasión y consumo en todas las edades. Se realizan el campeonato mundial del alfajor, ferias alfajoreras y existe todo un universo que rodea a la industria alfajorera.
El mejor del mundo… otra vez
En 2025, el sitio internacional Taste Atlas volvió a destacar al alfajor argentino como la mejor galleta del mundo, consolidando su lugar como embajador dulce de nuestra cultura. Exportado a más de 30 países, es un símbolo nacional al nivel del mate, el asado y el dulce de leche.