Durante el día viernes 2 de octubre los kioscos de la provincia de Mendoza no realizaron cargas de tarjetas SUBE como forma re reclamo que sostienen hace años.
La principal cuestión es la escasa rentabilidad que implica el servicio a cambio de un gran esfuerzo para sus bolsillos.
También refieren como sustento de la medida tener que pagar uso de plataforma, abonos mensuales, invertir su dinero para tener carga a cambio de una ganancia ínfima y falta de insumos.
La decisión fue tomada por la Cámara de Kiosqueros Unidos de la provincia e involucra fundamentalmente al Gran Mendoza, aunque destacan que Las Heras es donde más adhesiones hubo y también se suman comercios de otros departamentos de la provincia.
Explican que deben invertir por anticipado para comprar la carga, la ganancia es de 1% y se cobra unos 30 días después.
Sin embargo aseguran que en la práctica demora dos o tres meses.
Esto implica un esfuerzo muy grande ya que por la demanda hay quienes deben cargar 30 mil pesos por día, por dar un ejemplo.
Además las empresas que la subsidiaria (que lleva las máquinas y hace el mantenimiento) cobra alrededor de 400 pesos mensuales y en algunos casos 7 pesos diarios por el servicio.
Esto implica que si se invierten 100 mil pesos se ganará de 1.000 pesos un mes después pero de allí habrá que pagar el servicio. Por eso hablan de que la ganancia termina reduciéndose a entre 0,5 y 0,8% según el arreglo.
Por otra parte, dijo que hay que considerar el servicio de internet.
Diego Ceballos es referente de la entidad y destacó que les resulta muy difícil de sostener: “50% de los kiosqueros está bajo la línea de pobreza y quizás más, no ganan más de 40 mil pesos (canasta básica de alimentos), yo tengo uno que anda bien y de casualidad llego a eso”, apuntó.
Agregó que además, cuando la clientela es mucha, deben contar con un empleado que se haga cargo de esa atención y eso es un costo indirecto.
Los rollos de papel para las máquinas son otro costo. Ceballos dijo que las subsidiarias les entregan un par de rollos cada 15 días pero según la demanda gastan un rollo por día o día y medio. Ese es un costo que se les suma ya que el precio de cada uno está entre 50 y 75 pesos.
Hay que tener en cuenta que a estos datos, se suma la baja en la movilidad urbana en el AMBA y en otras provincias dónde solo se permite a los trabajadores esenciales.
La facilidad para recargar la tarjea en medio digitales como Home Banking, Mercado Pago, entre otros.