Cuando Omnium, la familia de vinos creada por la bodega Viniterra, decidió lanzar Rosato y Dolcissimo estaba convencido de que sus características de juventud, frescura y gran dulzor no podían pasar inadvertidas.
Por esta razón, es que le plantearon al reconocido especialista en packaging Adrián Pierini, el desafío de crear para ellos una estética que rompiera absolutamente con los códigos habituales de la categoría.
El resultado fue un diseño sumamente innovador en el cual se jugó con las iniciales de las variedades, aplicándoles impactantes colores: naranja fluo y verde manzana para Dolcissimo, y violeta intenso y magenta profundo para Rosato. Luego, se las distribuyó de un modo lúdico dentro de una cuadricula, cuya función consistió en aportarle contención a la original composición.
Uno de los detalles más originales de este nuevo arte de Pierini consiste en los calados realizados en algunas de las iniciales, los cuales dejan ver el interior de la botella y corporizan el mensaje de informalidad y diversión que las variedades buscan transmitir.