Generalmente un kiosco es lo primero que viene a la mente de los emprendedores que cuentan con un poco de efectivo y no saben donde invertir. Pero como se puede ver, no siempre esa inversión da los frutos esperados, y en estos diez puntos pueden estar las causas de ese fracaso:
- Mala Administración: La mayoria de los que invierten, no saben administrar y «se comen el negocio».
- Falta de espalda suficiente: Cuando invertimos debemos calcular por lo menos dos situaciones: Una buena, donde lo que vendemos (y ganamos) es suficiente para cubrir los gastos, y una mala, donde esto no ocurre, y donde un ahorro de fondos pueden salvar a nuestro negocio.
- Falta de Control: Si hay empleados, estos deben estar controlados ya que los margenes de este tipo de negocios son muy bajos, y si no hay control y se producen robos, perdidas, etc pueden convertirse en margenes negativos muy rápidamente.
- Compras mal realizadas: Muchos kiosqueros compran «lo que a ellos le gusta», y este es un típico error. Demos pensar que el cliente tiene la razón, y debemos vender lo que ellos desean comprar.
- Horario de Atención equivocado: Si pensas algo de esto, estas en problemas «Yo abro cuando me levanto», «el domingo es para descansar», «atiendo hasta donde puedo», «que me esperen». (Este punto obviamente depende de los horarios de los clientes).
- Mala Ubicación: Cuando hablamos de kiosco, la ubicación es el 90% del negocio, si no hay ubicación, no hay negocio.
- Falta de Marketing: Colores, logo, música, abundancia de mercadería, estrategia en la ubicación de productos, buena atención, promociones, también deben estar en un kiosco, y a veces se olvidan de muchas de estas.
- Faltantes de Mercadería: Si no lo tenes vos, seguro van a cruzar la calle e ir al otro kiosco, y probablemente pierdas un cliente.
- Precios altos: Si bien depende del target de cliente, muchas veces, la gente prefiere hacer «dos cuadras mas» a pagar un precio mas alto. Marcar los productos con margenes inapropiados puede matar tu negocio a largo plazo.
- Mala Atención: La imagen es todo, y eso incluye la sonrisa del dueño o empleado. Debes asegurarte que siempre este la mejor cara en la persona que atiende.